Este es un mago bien vestido, encantador; y tiene un repertorio como para todos los gustos. No siempre usa los recursos tradicionales: conejos, pañuelos; también saca del sombrero palabras que solucionan impasses conceptuales, éticos y filosóficos. Los conceptos, reformulados, pueden ser artilugios útiles cuando se los necesita. Uno de los vocablos mágicos cada vez más utilizados es:
Es una palabra fantástica y de popularidad creciente: tiene que ver con el juego. Jugar es bueno: los niños juegan, y jugar con ellos nos enriquece y hace mejores. Hay juegos que liberan y distienden; otros que pueden conducir a severas adicciónes.
Jugar puede ser también la clave para no tomar las cosas tan en serio; para estimularnos a tener una mirada amable sobre lo que hacemos o pensamos, sin que nos hagamos mayores problemas. En tiempos ya superados, el ejercicio de la literatura, las artes visuales, el pensamiento, los estilos de vida y toda forma de expresión, implicaba asumir una responsabilidad y un costo. Esas actitudes heroicas no encajan mucho en la modernidad.
Jugar puede ser también la clave para no tomar las cosas tan en serio; para estimularnos a tener una mirada amable sobre lo que hacemos o pensamos, sin que nos hagamos mayores problemas. En tiempos ya superados, el ejercicio de la literatura, las artes visuales, el pensamiento, los estilos de vida y toda forma de expresión, implicaba asumir una responsabilidad y un costo. Esas actitudes heroicas no encajan mucho en la modernidad.